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Recomendaciones SBSTTA 2

SBSTTA 2 Recomendación II/1
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Temas del programa

3.1: Evaluación de la diversidad biológica y metodologías para futuras evaluaciones

3.2: Identificación, vigilancia y evaluación de componentes de la diversidad biológica y de procesos que tienen consecuencias adversas

3.3: Examen y promoción de indicadores de la diversidad biológica

1. Asesoramiento de índole general

1. Hubo un amplio acuerdo en que los temas 3.1, 3.2 y 3.3 del programa estaban indisolublemente vinculados y, por tanto, debían examinarse conjuntamente. Se reconoció que se trataba de un asunto de gran complejidad y de importancia capital para el Convenio, especialmente en relación con el artículo 7, aunque también con otros artículos como el 6, el 8, el 16, el 25 y el 26. Se estimó que los documentos de antecedentes preparados por la Secretaría (UNEP/CBD/SBSTTA/2/2, UNEP/CBD/SBSTTA/2/3 y UNEP/CBD/SBSTTA/2/4) contenían enfoques útiles para abordar estas cuestiones.

2. Se hizo hincapié repetidamente en la importancia de la creación de capacidad y el desarrollo y fomento de las instituciones (y el apoyo financiero correspondiente) para asistir a los países en desarrollo en todos los aspectos de sus evaluaciones.

3. Se resaltó el papel que el mecanismo de facilitación debería desempeñar en el mejoramiento de la corriente de información. Se planteó la posible necesidad de adoptar medidas provisionales en el marco del mecanismo de facilitación.

4. Se señaló que la ampliación del conocimiento taxonómico era fundamental para el desarrollo de indicadores y las evaluaciones.

5. Se hizo hincapié en que la evaluación de la diversidad biológica era, en última instancia, responsabilidad de cada una de las Partes, por lo que las actividades de la evaluación debían centrarse en los informes nacionales. Cuando fuese necesario, debería recurrirse a los órganos regionales para recabar información que facilitase la evaluación de la diversidad biológica fuera de las jurisdicciones nacionales. Se planteó la cuestión de cómo la Secretaría y el OSACTT iban a utilizar los informes nacionales cuando comenzaran a recibirse.

6. Hubo un amplio acuerdo en que las evaluaciones deberían ser: transparentes; basadas en principios científicos; basadas inicialmente en el conocimiento disponible; centradas; pragmáticas; eficaces en relación con su costo; elaboradas en un contexto socioeconómico; y orientadas hacia la ordenación o hacia las políticas. Se reconoció que los indicadores eran un aspecto vital de esas evaluaciones y que el marco presión-estado-respuesta era particularmente útil. Se hizo una distinción entre las evaluaciones de la diversidad biológica en sí misma y la evaluación del estado de los conocimientos sobre la diversidad biológica. La primera revestía principalmente un interés nacional, en tanto que la última revestía interés a nivel regional y mundial.

7. Hubo peticiones de que se elaborasen y perfeccionasen directrices para la presentación de informes nacionales. En ese contexto, se mencionaron las directrices del PNUMA para la realización de estudios nacionales. Se resaltó la importancia de la armonización, ya que permitiría establecer comparaciones entre ecosistemas similares de diferentes países y también facilitaría la elaboración de informes generales como el Panorama Mundial de la Diversidad Biológica. Se planteó la necesidad de elaborar un conjunto básico de indicadores para la preparación de informes nacionales, que debería ser fácil y ampliamente medible y servir de apoyo a las políticas. Inicialmente, debería hacerse hincapié en indicadores cuyo éxito ya se conociese. Los conocimientos tradicionales podrían desempeñar un papel valioso en la elaboración de indicadores, así como en la vigilancia y la evaluación.

8. No obstante, se suscitó repetidamente la necesidad de que el enfoque de la evaluación, la elaboración de informes nacionales y el desarrollo de indicadores fuese flexible dada la gran variación de las condiciones ecológicas y las capacidades nacionales. Se dio mucho apoyo a los enfoques regionales o por ecosistemas para la elaboración de directrices e indicadores y se señaló que no era probable que se encontrase nunca un método óptimo para realizar la evaluación. En ese sentido podría ser de utilidad el anexo del documento preparado por la Secretaría (UNEP/CBD/SBSTTA/2/2), ya que en él se establecía una serie de metodologías que permitía elegir la más apropiada para un conjunto dado de circunstancias.

9. Se sugirió un enfoque de dos vías para la evaluación y la elaboración de indicadores. A corto plazo, deberían realizarse evaluaciones de sectores y componentes de la diversidad biológica que ya eran razonablemente bien conocidos. En las esferas que necesitasen una ampliación del conocimiento debían elaborarse programas a largo plazo en los que se tuviera en cuenta la investigación y la creación de capacidad.

10. Se hizo una distinción entre la realización de inventarios y evaluaciones y la vigilancia de la diversidad biológica. La última debería guardar relación con los efectos provocados por el hombre. Se señaló también que, aunque en sí mismos eran procesos difíciles y costosos, los inventarios de la diversidad biológica eran más directos que la evaluación de los efectos y cambios provocados en la diversidad biológica. Esta última precisaba una profundización de los conocimientos y una vigilancia a largo plazo. En este último sentido se señaló que las reservas de biosfera ofrecían unas posibilidades extremadamente valiosas.

11. La coordinación con convenios y procesos internacionales conexos se consideró de gran importancia. Ello debería servir para reducir al mínimo la duplicación de esfuerzos. Además, la experiencia obtenida en la preparación de informes para esos convenios y procesos podía servir para preparar directrices para la elaboración de informes y para el desarrollo de indicadores dentro del marco del Convenio sobre la Diversidad Biológica.

12. Se subrayó lo deseable que sería preparar evaluaciones temáticas que se ajustasen a los temas principales y a las necesidades específicas del Convenio. Se reconoció, en particular, la urgente necesidad de realizar una evaluación global de los ecosistemas de agua dulce. También se hizo mención de la necesidad de realizar evaluaciones de los ecosistemas costero y marino, de las praderas y de las zonas húmedas, además de los mencionados en el documento de la Secretaría (UNEP/CBD/SBSTTA/2/2).

13. Se reconoció ampliamente la importancia de evaluar la diversidad biológica de los sistemas agrícolas. Se hizo hincapié en que una evaluación de esa naturaleza debería tener en cuenta la labor realizada por la FAO. Se señaló que existía una interdependencia entre el sostenimiento de la diversidad biológica y el sostenimiento de la agricultura. Se reconoció también que las prácticas agrícolas podían afectar a la diversidad biológica en los ecosistemas agrícolas de forma tanto negativa como positiva y que cuando las actividades individuales de muchos productores se consideraban en conjunto, existía la posibilidad de que se produjeran efectos significativos sobre la diversidad biológica fuera de los lugares en que se realizasen esas actividades. Como la agricultura se desarrolla en parajes que incluyen a menudo otros tipos de uso de la tierra, era necesario ampliar el conocimiento del papel que desempeña la agricultura en el contexto global de una región.

14. Se destacó también que las evaluaciones del estado de la diversidad biológica deberían incorporarse, de forma prioritaria, en las evaluaciones de recursos a nivel regional y mundial para que sirvieran de base en la adopción de decisiones relativas a la ordenación en los sectores que tuvieran efectos importantes en el estado de la diversidad biológica, especialmente en relación con los ecosistemas marinos, agrícolas y forestales. Ello entrañaría la cooperación con organismos y organizaciones que se ocupan de las evaluaciones de recursos a nivel regional y mundial, como la FAO, y se debería colaborar también con los convenios pertinentes, como el que se ocupa de las poblaciones de peces que se encuentran dentro y fuera de las zonas económicas exclusivas y las poblaciones de peces altamente migratorios.

15. Se señaló que las evaluaciones temáticas coordinadas por países permitirían preparar visiones temáticas generales dentro del Panorama Mundial de la Diversidad Biológica.

16. Se dio un apoyo general al marco propuesto de procesos y categorías de actividades que tienen o probablemente tendrán consecuencias adversas importantes para la diversidad biológica (párrafos 39 a 41 del documento UNEP/CBD/SBSTTA/2/3). Se hicieron varias recomendaciones para su enmienda o modificación. Se mencionaron los contaminantes radiactivos como una amenaza adicional, la ordenación errónea de la tierra como una actividad que tenía efectos adversos sobre la diversidad biológica y el fracaso de la política nacional como una causa última adicional de amenaza. Además, se señaló que el uso consuntivo de especies silvestres podría contribuir a la conservación. Se sugirió que se realizasen las evaluaciones utilizando ese marco para establecer prioridades, teniendo en cuenta que esas prioridades variarían en distintos países.

17. Se estimó conveniente realizar alguna forma de actividad entre períodos de sesiones (por ejemplo un grupo de enlace o un grupo de trabajo oficioso) para examinar cuestiones tales como el desarrollo de directrices para la elaboración de informes nacionales y una revisión de las iniciativas emprendidas en relación con los indicadores. Se sugirió también que los indicadores y la vigilancia deberían examinarse conjuntamente como un tema permanente en el programa del OSACTT.

2. Conclusiones y recomendaciones

18. El OSACTT reconoce la importancia vital de la vigilancia y la evaluación de la diversidad biológica, especialmente en relación con el artículo 7 del Convenio, y reconoce además que la responsabilidad principal de emprender las actividades de vigilancia y evaluación de la diversidad biológica recae en las Partes de forma individual.

19. El OSACTT propone un enfoque de dos vías para la evaluación y el desarrollo de indicadores. A corto plazo, la evaluación debería realizarse por sectores y componentes de la diversidad biológica que ya sean bien conocidos y entendidos. En particular, deberían utilizarse los indicadores que se sabe que funcionan bien. En las esferas que precisan una profundización de los conocimientos deberían elaborarse programas a largo plazo que incluyan la investigación y la creación de capacidad.

2.1 Tareas prioritarias

20. El OSACTT estimó que debería asignarse una alta prioridad a las siguientes tareas:

i) Fomento de la capacidad, fortalecimiento de las instituciones y financiación en los países en desarrollo para llevar a cabo la identificación, la vigilancia y la evaluación en el marco del Convenio;

ii) Desarrollo del mecanismo de facilitación para mejorar la corriente de información en relación tanto con los informes nacionales como con la comunidad científica internacional;

iii) Elaboración y perfeccionamiento de directrices nacionales que incluyan: metodología para la evaluación y la vigilancia; indicadores; enfoques temáticos; definición y aclaración de conceptos; recomendaciones para la armonización;

iv) Preparación de un examen crítico de metodologías para la elaboración de inventarios y evaluaciones según lo dispuesto en el anexo 1 del documento UNEP/CBD/SBSTTA/2/2;

v) Desarrollo de un conjunto básico de indicadores para los informes nacionales. Esos indicadores deberían basarse en principio en aquellos que se conoce que funcionan bien;

vi) Desarrollo de indicadores en esferas temáticas de interés para el Convenio, especialmente las de los ecosistemas costeros y marinos (incluidos los manglares), la diversidad biológica agrícola y los ecosistemas forestales y de agua dulce;

vii) Desarrollo de un marco indicativo de procesos y categorías de actividades que tienen o probablemente tendrán consecuencias adversas importantes para la diversidad biológica;

viii) Elaboración de métodos para fortalecer los vínculos entre las evaluaciones de recursos naturales y las evaluaciones de la diversidad biológica, mediante la introducción de dimensiones relacionadas con la diversidad biológica en las evaluaciones de los recursos, incluidas las evaluaciones de bosques, recursos de tierra, suelos y recursos marinos vivos.

21. El OSACTT señaló que el desarrollo de un conjunto básico de indicadores entrañaría una revisión de los enfoques actuales del desarrollo de indicadores, así como el desarrollo de indicadores en esferas temáticas de interés para el Convenio.

22. El OSACTT consideró que también eran importantes las siguientes tareas:

i) Elaboración de directrices regionales o basadas en los ecosistemas para la realización de evaluaciones;

ii) Preparación de evaluaciones temáticas de los conocimientos y del estado de la diversidad biológica en uno o más de los siguientes ecosistemas: agua dulce; costero y marino; bosques y tierras arboladas; sistemas de montaña; tierras de pastoreo y tierras áridas y semiáridas; praderas; zonas húmedas; sistemas agrícolas;

iii) Determinación de los costos y beneficios de la conservación de la diversidad biológica y su utilización sostenible;

iv) Asistencia en la preparación del Panorama Mundial de la Diversidad Biológica;

v) Estudio y explicación más detallada de los conceptos que figuran en el anexo 1 del Convenio, y que se examinan en detalle en el documento UNEP/CBD/SBSTTA/2/3;

vi) Revisión de los métodos para la vigilancia de las actividades que tengan o puedan tener efectos adversos en la diversidad biológica, especialmente en relación con los indicadores de presión y el contexto socioeconómico del uso de la diversidad biológica, así como los efectos de la tecnología, incluida la biotecnología. Esa revisión debería incluir alternativas para mitigar los efectos de esas actividades.

2.2 Recomendaciones específicas propuestas.

23. En respuesta a esas prioridades, el OSACTT recomienda a la Conferencia de las Partes que pida al Secretario Ejecutivo que prepare, en consulta con un grupo de expertos o de enlace, y para su examen por el OSACTT en su próxima reunión:

i) Un informe orientativo para ayudar a las Partes a abordar esas cuestiones. Ese informe debería contener una explicación de las metodologías de evaluación que permitan cumplir los requisitos del Convenio, teniendo en cuenta los contenidos de los informes nacionales que ya se han preparado y de los informes elaborados para otros convenios y procesos internacionales. Ese informe debería contener también: información sobre indicadores y técnicas de vigilancia; definiciones y aclaraciones de conceptos y recomendaciones para la armonización. La preparación de las directrices no debería retrasar la elaboración de los informes nacionales en curso de preparación;

ii) Una lista de alternativas, para su examen por el OSACTT, en materia de creación de capacidad en los países en desarrollo para la aplicación de las directrices e indicadores en la elaboración de informes nacionales posteriores;

iii) Una lista de los enfoques actuales del desarrollo de indicadores, que se distribuiría en la siguiente reunión del OSACTT y recomendaciones para un conjunto básico preliminar de indicadores de la diversidad biológica, especialmente aquellos relacionados con las amenazas;

24. El OSACTT recomienda a la Conferencia de las Partes que pida que cualesquiera directrices u otros elementos así preparados se sometan a la revisión de un conjunto de expertos e instituciones competentes.

25. El OSACTT recomienda también a la Conferencia de las Partes que pida al Secretario Ejecutivo que inicie consultas con otras organizaciones regionales y mundiales, en particular la FAO, que se ocupan de la evaluación de los recursos biológicos dentro de los sectores económicos pertinentes, para tratar de asegurar que la diversidad biológica se incluya en las evaluaciones de recursos realizadas por esas organizaciones regionales y mundiales con miras a influenciar las decisiones relativas a la ordenación.

26. En vista de la complejidad de estas cuestiones y su importancia capital para la aplicación del Convenio, el OSACTT recomienda que los indicadores, la evaluación y la vigilancia se examinen conjuntamente como un tema permanente de su programa.

Temas del programa

3.1: Evaluación de la diversidad biológica y metodologías para futuras evaluaciones

3.2: Identificación, vigilancia y evaluación de componentes de la diversidad biológica y de procesos que tienen consecuencias adversas

3.3: Examen y promoción de indicadores de la diversidad biológica

1. Asesoramiento de índole general

1. Hubo un amplio acuerdo en que los temas 3.1, 3.2 y 3.3 del programa estaban indisolublemente vinculados y, por tanto, debían examinarse conjuntamente. Se reconoció que se trataba de un asunto de gran complejidad y de importancia capital para el Convenio, especialmente en relación con el artículo 7, aunque también con otros artículos como el 6, el 8, el 16, el 25 y el 26. Se estimó que los documentos de antecedentes preparados por la Secretaría (UNEP/CBD/SBSTTA/2/2, UNEP/CBD/SBSTTA/2/3 y UNEP/CBD/SBSTTA/2/4) contenían enfoques útiles para abordar estas cuestiones.

2. Se hizo hincapié repetidamente en la importancia de la creación de capacidad y el desarrollo y fomento de las instituciones (y el apoyo financiero correspondiente) para asistir a los países en desarrollo en todos los aspectos de sus evaluaciones.

3. Se resaltó el papel que el mecanismo de facilitación debería desempeñar en el mejoramiento de la corriente de información. Se planteó la posible necesidad de adoptar medidas provisionales en el marco del mecanismo de facilitación.

4. Se señaló que la ampliación del conocimiento taxonómico era fundamental para el desarrollo de indicadores y las evaluaciones.

5. Se hizo hincapié en que la evaluación de la diversidad biológica era, en última instancia, responsabilidad de cada una de las Partes, por lo que las actividades de la evaluación debían centrarse en los informes nacionales. Cuando fuese necesario, debería recurrirse a los órganos regionales para recabar información que facilitase la evaluación de la diversidad biológica fuera de las jurisdicciones nacionales. Se planteó la cuestión de cómo la Secretaría y el OSACTT iban a utilizar los informes nacionales cuando comenzaran a recibirse.

6. Hubo un amplio acuerdo en que las evaluaciones deberían ser: transparentes; basadas en principios científicos; basadas inicialmente en el conocimiento disponible; centradas; pragmáticas; eficaces en relación con su costo; elaboradas en un contexto socioeconómico; y orientadas hacia la ordenación o hacia las políticas. Se reconoció que los indicadores eran un aspecto vital de esas evaluaciones y que el marco presión-estado-respuesta era particularmente útil. Se hizo una distinción entre las evaluaciones de la diversidad biológica en sí misma y la evaluación del estado de los conocimientos sobre la diversidad biológica. La primera revestía principalmente un interés nacional, en tanto que la última revestía interés a nivel regional y mundial.

7. Hubo peticiones de que se elaborasen y perfeccionasen directrices para la presentación de informes nacionales. En ese contexto, se mencionaron las directrices del PNUMA para la realización de estudios nacionales. Se resaltó la importancia de la armonización, ya que permitiría establecer comparaciones entre ecosistemas similares de diferentes países y también facilitaría la elaboración de informes generales como el Panorama Mundial de la Diversidad Biológica. Se planteó la necesidad de elaborar un conjunto básico de indicadores para la preparación de informes nacionales, que debería ser fácil y ampliamente medible y servir de apoyo a las políticas. Inicialmente, debería hacerse hincapié en indicadores cuyo éxito ya se conociese. Los conocimientos tradicionales podrían desempeñar un papel valioso en la elaboración de indicadores, así como en la vigilancia y la evaluación.

8. No obstante, se suscitó repetidamente la necesidad de que el enfoque de la evaluación, la elaboración de informes nacionales y el desarrollo de indicadores fuese flexible dada la gran variación de las condiciones ecológicas y las capacidades nacionales. Se dio mucho apoyo a los enfoques regionales o por ecosistemas para la elaboración de directrices e indicadores y se señaló que no era probable que se encontrase nunca un método óptimo para realizar la evaluación. En ese sentido podría ser de utilidad el anexo del documento preparado por la Secretaría (UNEP/CBD/SBSTTA/2/2), ya que en él se establecía una serie de metodologías que permitía elegir la más apropiada para un conjunto dado de circunstancias.

9. Se sugirió un enfoque de dos vías para la evaluación y la elaboración de indicadores. A corto plazo, deberían realizarse evaluaciones de sectores y componentes de la diversidad biológica que ya eran razonablemente bien conocidos. En las esferas que necesitasen una ampliación del conocimiento debían elaborarse programas a largo plazo en los que se tuviera en cuenta la investigación y la creación de capacidad.

10. Se hizo una distinción entre la realización de inventarios y evaluaciones y la vigilancia de la diversidad biológica. La última debería guardar relación con los efectos provocados por el hombre. Se señaló también que, aunque en sí mismos eran procesos difíciles y costosos, los inventarios de la diversidad biológica eran más directos que la evaluación de los efectos y cambios provocados en la diversidad biológica. Esta última precisaba una profundización de los conocimientos y una vigilancia a largo plazo. En este último sentido se señaló que las reservas de biosfera ofrecían unas posibilidades extremadamente valiosas.

11. La coordinación con convenios y procesos internacionales conexos se consideró de gran importancia. Ello debería servir para reducir al mínimo la duplicación de esfuerzos. Además, la experiencia obtenida en la preparación de informes para esos convenios y procesos podía servir para preparar directrices para la elaboración de informes y para el desarrollo de indicadores dentro del marco del Convenio sobre la Diversidad Biológica.

12. Se subrayó lo deseable que sería preparar evaluaciones temáticas que se ajustasen a los temas principales y a las necesidades específicas del Convenio. Se reconoció, en particular, la urgente necesidad de realizar una evaluación global de los ecosistemas de agua dulce. También se hizo mención de la necesidad de realizar evaluaciones de los ecosistemas costero y marino, de las praderas y de las zonas húmedas, además de los mencionados en el documento de la Secretaría (UNEP/CBD/SBSTTA/2/2).

13. Se reconoció ampliamente la importancia de evaluar la diversidad biológica de los sistemas agrícolas. Se hizo hincapié en que una evaluación de esa naturaleza debería tener en cuenta la labor realizada por la FAO. Se señaló que existía una interdependencia entre el sostenimiento de la diversidad biológica y el sostenimiento de la agricultura. Se reconoció también que las prácticas agrícolas podían afectar a la diversidad biológica en los ecosistemas agrícolas de forma tanto negativa como positiva y que cuando las actividades individuales de muchos productores se consideraban en conjunto, existía la posibilidad de que se produjeran efectos significativos sobre la diversidad biológica fuera de los lugares en que se realizasen esas actividades. Como la agricultura se desarrolla en parajes que incluyen a menudo otros tipos de uso de la tierra, era necesario ampliar el conocimiento del papel que desempeña la agricultura en el contexto global de una región.

14. Se destacó también que las evaluaciones del estado de la diversidad biológica deberían incorporarse, de forma prioritaria, en las evaluaciones de recursos a nivel regional y mundial para que sirvieran de base en la adopción de decisiones relativas a la ordenación en los sectores que tuvieran efectos importantes en el estado de la diversidad biológica, especialmente en relación con los ecosistemas marinos, agrícolas y forestales. Ello entrañaría la cooperación con organismos y organizaciones que se ocupan de las evaluaciones de recursos a nivel regional y mundial, como la FAO, y se debería colaborar también con los convenios pertinentes, como el que se ocupa de las poblaciones de peces que se encuentran dentro y fuera de las zonas económicas exclusivas y las poblaciones de peces altamente migratorios.

15. Se señaló que las evaluaciones temáticas coordinadas por países permitirían preparar visiones temáticas generales dentro del Panorama Mundial de la Diversidad Biológica.

16. Se dio un apoyo general al marco propuesto de procesos y categorías de actividades que tienen o probablemente tendrán consecuencias adversas importantes para la diversidad biológica (párrafos 39 a 41 del documento UNEP/CBD/SBSTTA/2/3). Se hicieron varias recomendaciones para su enmienda o modificación. Se mencionaron los contaminantes radiactivos como una amenaza adicional, la ordenación errónea de la tierra como una actividad que tenía efectos adversos sobre la diversidad biológica y el fracaso de la política nacional como una causa última adicional de amenaza. Además, se señaló que el uso consuntivo de especies silvestres podría contribuir a la conservación. Se sugirió que se realizasen las evaluaciones utilizando ese marco para establecer prioridades, teniendo en cuenta que esas prioridades variarían en distintos países.

17. Se estimó conveniente realizar alguna forma de actividad entre períodos de sesiones (por ejemplo un grupo de enlace o un grupo de trabajo oficioso) para examinar cuestiones tales como el desarrollo de directrices para la elaboración de informes nacionales y una revisión de las iniciativas emprendidas en relación con los indicadores. Se sugirió también que los indicadores y la vigilancia deberían examinarse conjuntamente como un tema permanente en el programa del OSACTT.

2. Conclusiones y recomendaciones

18. El OSACTT reconoce la importancia vital de la vigilancia y la evaluación de la diversidad biológica, especialmente en relación con el artículo 7 del Convenio, y reconoce además que la responsabilidad principal de emprender las actividades de vigilancia y evaluación de la diversidad biológica recae en las Partes de forma individual.

19. El OSACTT propone un enfoque de dos vías para la evaluación y el desarrollo de indicadores. A corto plazo, la evaluación debería realizarse por sectores y componentes de la diversidad biológica que ya sean bien conocidos y entendidos. En particular, deberían utilizarse los indicadores que se sabe que funcionan bien. En las esferas que precisan una profundización de los conocimientos deberían elaborarse programas a largo plazo que incluyan la investigación y la creación de capacidad.

2.1 Tareas prioritarias

20. El OSACTT estimó que debería asignarse una alta prioridad a las siguientes tareas:

i) Fomento de la capacidad, fortalecimiento de las instituciones y financiación en los países en desarrollo para llevar a cabo la identificación, la vigilancia y la evaluación en el marco del Convenio;

ii) Desarrollo del mecanismo de facilitación para mejorar la corriente de información en relación tanto con los informes nacionales como con la comunidad científica internacional;

iii) Elaboración y perfeccionamiento de directrices nacionales que incluyan: metodología para la evaluación y la vigilancia; indicadores; enfoques temáticos; definición y aclaración de conceptos; recomendaciones para la armonización;

iv) Preparación de un examen crítico de metodologías para la elaboración de inventarios y evaluaciones según lo dispuesto en el anexo 1 del documento UNEP/CBD/SBSTTA/2/2;

v) Desarrollo de un conjunto básico de indicadores para los informes nacionales. Esos indicadores deberían basarse en principio en aquellos que se conoce que funcionan bien;

vi) Desarrollo de indicadores en esferas temáticas de interés para el Convenio, especialmente las de los ecosistemas costeros y marinos (incluidos los manglares), la diversidad biológica agrícola y los ecosistemas forestales y de agua dulce;

vii) Desarrollo de un marco indicativo de procesos y categorías de actividades que tienen o probablemente tendrán consecuencias adversas importantes para la diversidad biológica;

viii) Elaboración de métodos para fortalecer los vínculos entre las evaluaciones de recursos naturales y las evaluaciones de la diversidad biológica, mediante la introducción de dimensiones relacionadas con la diversidad biológica en las evaluaciones de los recursos, incluidas las evaluaciones de bosques, recursos de tierra, suelos y recursos marinos vivos.

21. El OSACTT señaló que el desarrollo de un conjunto básico de indicadores entrañaría una revisión de los enfoques actuales del desarrollo de indicadores, así como el desarrollo de indicadores en esferas temáticas de interés para el Convenio.

22. El OSACTT consideró que también eran importantes las siguientes tareas:

i) Elaboración de directrices regionales o basadas en los ecosistemas para la realización de evaluaciones;

ii) Preparación de evaluaciones temáticas de los conocimientos y del estado de la diversidad biológica en uno o más de los siguientes ecosistemas: agua dulce; costero y marino; bosques y tierras arboladas; sistemas de montaña; tierras de pastoreo y tierras áridas y semiáridas; praderas; zonas húmedas; sistemas agrícolas;

iii) Determinación de los costos y beneficios de la conservación de la diversidad biológica y su utilización sostenible;

iv) Asistencia en la preparación del Panorama Mundial de la Diversidad Biológica;

v) Estudio y explicación más detallada de los conceptos que figuran en el anexo 1 del Convenio, y que se examinan en detalle en el documento UNEP/CBD/SBSTTA/2/3;

vi) Revisión de los métodos para la vigilancia de las actividades que tengan o puedan tener efectos adversos en la diversidad biológica, especialmente en relación con los indicadores de presión y el contexto socioeconómico del uso de la diversidad biológica, así como los efectos de la tecnología, incluida la biotecnología. Esa revisión debería incluir alternativas para mitigar los efectos de esas actividades.

2.2 Recomendaciones específicas propuestas.

23. En respuesta a esas prioridades, el OSACTT recomienda a la Conferencia de las Partes que pida al Secretario Ejecutivo que prepare, en consulta con un grupo de expertos o de enlace, y para su examen por el OSACTT en su próxima reunión:

i) Un informe orientativo para ayudar a las Partes a abordar esas cuestiones. Ese informe debería contener una explicación de las metodologías de evaluación que permitan cumplir los requisitos del Convenio, teniendo en cuenta los contenidos de los informes nacionales que ya se han preparado y de los informes elaborados para otros convenios y procesos internacionales. Ese informe debería contener también: información sobre indicadores y técnicas de vigilancia; definiciones y aclaraciones de conceptos y recomendaciones para la armonización. La preparación de las directrices no debería retrasar la elaboración de los informes nacionales en curso de preparación;

ii) Una lista de alternativas, para su examen por el OSACTT, en materia de creación de capacidad en los países en desarrollo para la aplicación de las directrices e indicadores en la elaboración de informes nacionales posteriores;

iii) Una lista de los enfoques actuales del desarrollo de indicadores, que se distribuiría en la siguiente reunión del OSACTT y recomendaciones para un conjunto básico preliminar de indicadores de la diversidad biológica, especialmente aquellos relacionados con las amenazas;

24. El OSACTT recomienda a la Conferencia de las Partes que pida que cualesquiera directrices u otros elementos así preparados se sometan a la revisión de un conjunto de expertos e instituciones competentes.

25. El OSACTT recomienda también a la Conferencia de las Partes que pida al Secretario Ejecutivo que inicie consultas con otras organizaciones regionales y mundiales, en particular la FAO, que se ocupan de la evaluación de los recursos biológicos dentro de los sectores económicos pertinentes, para tratar de asegurar que la diversidad biológica se incluya en las evaluaciones de recursos realizadas por esas organizaciones regionales y mundiales con miras a influenciar las decisiones relativas a la ordenación.

26. En vista de la complejidad de estas cuestiones y su importancia capital para la aplicación del Convenio, el OSACTT recomienda que los indicadores, la evaluación y la vigilancia se examinen conjuntamente como un tema permanente de su programa.